A propósito de una contestación que di a un conocido que me envió un correo con un video de uno que tenía pinta de haber votado marxista toda la vida de Dios y ahora, escandalizado -¡pobrecito él, inocente!-, pedía que cayera un meteorito al leer la relación de despilfarros -¡qué novedad!- de la Consejería de Gobierno de la Junta de Andalucía. ¡Qué tarde, tardísimo se indignan todos éstos!
“Triunfa en la red un ciudadano
escandalizado con el despilfarro en las agencias de la Junta.”
¡A buenas horas mangas verdes!
Después de treinta años robando ahora se echan las manos a la cabeza. ¡Qué pensó
este pájaro cuando se enteró de lo de mienmano, el de Arfonzo Guerra! ¡Y los
crímenes de Estado y el trinque de los fondos reservados! ¡Mil tropelías y
robos más! ¿O es que la criaturita sólo leía “El País”, sólo escuchaba la
“Ser”, sólo veía “Canal Sur”? Y los que teníamos y seguimos conservando un poco
de dignidad y lo denunciábamos desde el principio, como atentados contra el
erario público –nuestra hacienda y propiedad- y nuestra libertad, contra
nuestra condición de ciudadanos, y que no pagaban ni quema’os estos tiparracos,
entonces éramos unos “fachas”.
Y ahora que hemos llegado a la ruina
más absoluta se escandaliza este tipejo como si se hubiera enterado ayer por la
mañana y a través de un amigo por el “Feisbu”. ¡Vamos hombre, si lo sabíamos
todo de todo de todos! Lo que pasa es que mientras eran de mi cuerda y había
dinero pues… ancha es Castilla. Y el problema eran dos trajes de Camps. Ah, y
Esperanza Aguirre que es mu’ mala y Aznar, un asesino. Y con este sectarismo
congénito pues hasta la ruina. Y yo, que lo denuncié y lo dije y me informé
como buen ciudadano, pues me tengo ahora que joder con la gracieta de tantos
bellacos que han llevado al poder y han mantenido a la tropa de chorizos y de
hijos de mala madre más ruin que se haya visto y que nos ha llevado a la
miseria. Me dan náuseas. Y dice el tiparraco que no dice que no haya que ayudar
a otros países. Pues ayúdalos tú con tu dinero, mamón. Pero del público ni un
duro. Sé solidario con tu dinero pero no con el de los demás. Y se queja de lo
que hacen los ladrones o los socialistas, que viene a ser lo mismo, de la
Junta. ¡Y tener que soportar y convivir con semejante tropa de liberticidas y
sus babosos lacayos!
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